Albóndigas En Salsa De Cebolla

Una patatita siempre y en todo momento será bienvenida, de esta manera sea al horno, frita o, si me apuras, de bolsa. Guarda esta receta para encontrarla mucho más de manera fácil cuando la quieras cocinar. Nací en pleno barrio de La Isla, en Las Palmas de Enorme Canaria. Aprendí a desenvolverme en la cocina gracias a mi madre y, en especial, a mi abuela, de la que aprendí trucos y recetas. Transcurrido un tiempo he ido creando algunas novedosas y amoldando otras. Retiramos del fuego y dejamos reposar hasta el momento en que las hayamos ido a ser útil.

vaso

Corta las cebollas en cuadrados y póchalas en el aceite que tenías guardado en la sartén. Bajar restos hacia las cuchillas, añadir el aceite y pochar 12 min., varoma, vel. En este momento vamos a efectuar la salsa, y para ello necesitamos tener listo 1 litro de caldo de carne y lo reservamos. Por medio de el envío de mis datos personales acepto que estos sean usados para la gestión y tramitación de mi solicitud de información enviada a través del formulario de contacto.

– Añadimos A La Salsa Las Albóndigas

Es muy sorprendente por la textura y la salsa les va como anillo al dedo. Pondremos una sartén con abundante aceite, cuando este candente las iremos dorando, entonces se terminaran de cocinar con la salsa. Agregamos las albóndigas a la salsa y calentamos el conjunto a fuego suave durante unos 15 minutos exactamente. Añade las albóndigas, riega si fuera preciso con un poco de caldo, y deja que tomen gusto a lo largo de unos minutos. El almacenaje o ingreso técnico es requisito para hacer concretes de usuario para mandar propaganda, o para proseguir al usuario en una página o en múltiples web con fines de marketing similares. El almacenamiento o acceso técnico que se utiliza de forma exclusiva con fines estadísticos anónimos.

añadir

Aunque no lo parezca, estas albóndigas al vino blanco son muy fáciles de preparar. Siguiendo nuestros pasos e elementos, te saldrán unas 15 albóndigas que podrás dividir en cuatro personas . Ponemos una sartén o cazuela al fuego, añadimos 4 cucharadas de aceite y sofreímos la cebolla junto con los ajos hasta que estén con transparencia y empiecen a dorarse. Tienes múltiples opciones a la hora de congelar esta receta. Por un lado, puedes congelar solo las albóndigas sin freír. Una vez poseas lista la forma de cada albóndiga, introdúcelas en una bolsa de congelación y deja espacio de una a otra.

Para Las Albóndigas:

(Podéis poner unas patatitas en el fondo del varoma). La haremos de manera directa en la cazuela donde guisaremos las albóndigas, poniendo un perfecto chorro de aceite de oliva cubriendo el fondo. Entonces vamos a poner a sofreír las 2 cebollas y los 4 dientes de ajos sobrantes cortados en láminas, puesto que luego los vamos a triturar. Agregamos la harina y combinamos de forma rápida a fin de que no se queme.

Usando pan rallado en lugar de pan mojado en leche es muy posible que resulten algo apelmazadas. En el momento en que empiece a tomar color echaremos una cucharada de harina removemos. A continuación vamos a elaborar la salsa, y para ello requerimos tener preparado 1 litro de caldo de carne y lo reservamos.

Consejos Para Cocinar Albóndigas Con Salsa De Cebolla

Seguido pondremos el vino blanco, vamos a dejar unos minutos. Las albóndigas con salsa de cebollas están listas para comer. Una vez enharinadas las albóndigas iremos friéndolas en una sartén amplia y extensa con abundante aceite de oliva ardiente a fuego medio, dorándolas bien por doquier. Dales forma redonda a cada porción y pásalas por harina. Fríelas en una sartén con aceite y escúrrelas en un plato cubierto con papel absorbente de cocina.

He hecho un sofrito con cebolla, ajo, panceta fresca y pimiento verde para mezclar con la carne. El plus de jugosidad que conseguimos, es sencillamente incomparable. Mientras que macera la carne, haremos la salsa de cebolla. La haremos de forma directa en la cazuela donde guisaremos las albóndigas, poniendo un óptimo chorro de aceite de oliva cubriendo el fondo.

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Si no esperas a que coja ese color, queda la salsa de un color amarillento que no es muy apetitoso, si bien está bueno también. Añade el pimentón, vuelca el caldo de pollo y deja que se cocine a lo largo de minutos. Cuando hayamos ido a elaborarlas, echaremos harina en un bol, haremos bolas con la carne y las iremos pasando por la harina. Cuando estén todas y cada una fabricadas, colaremos el aceite de freírlas, pondremos algo de este aceite en una olla y sofreiremos la cebolla picadita.

Esta es la receta mucho más básica para hacer el apaño de la carne para las albóndigas. Cuando tengamos la panceta llevada a cabo, añadiremos el pimiento verde cortado en trocitos pequeños también. Si te apetece puedes suscribirte a la página web para recibir cada día las novedades en tu correo, puedes hacerlopinchando aquí.