Si deseamos darle un toque cítrico, podemos hacer incisiones en el lomo del pez e ingresar rodajas de limón natural. Salpimentamos los lomos y los freímos -primero por la parte de la piel- en una sartén con aceite de oliva muy ardiente y reservamos. Entonces, sofreímos el ajo picado en láminas con la guindilla en una sartén con un magnífico chorro de aceite. En el instante en que empiecen a tomar color, agregamos las almejas y un poco de vino blanco; tapamos el envase y cocinamos hasta el día de hoy en que los moluscos hayan abierto sus conchas. Recetas de pescadoRecetas con AOVERecetas con vinagre de vino blancoRecetas con ajoRecetas con cayenaRecetas con pimentón dulce María Ángeles Fernández Viajante gastronómica y periodista intrépida. Con ellas cocino recetas y viajo con todas y cada una ellas cerca del mundo.
Puedes llenar este menú propio de la costa vasca sirviendo de postre una cuajada casera. Pide en tu pescadería que te abran el besugo y que retiren la espina central de entre los lomos, dejándola pegada al otro o aun, que te retiren la espina central; pero dejando el besugo entero. Crearte un usuario y comparte tus recetas con los users de Recetas.com, participa en nuestros foros de discusión de recetas de cocina, o apuntate al newsletter y recibe recetas en tu correo. Condimentar con sal gordita el besugo, ponerlo en una fuente previamente aceitada, tirarle algo de aceite por encima y meter al horno calentado previamente a 180º. Suscríbete para recibir cada día nuestras recetas, información sobre nutrición y actualidad sobre gastronomía.
Datos De La Receta
Con la mitad de esté líquido rociamos las patatas, salpimentamos levemente y metemos al horno tapadas con aluminio para que comiencen la cocción. Hay una cantidad enorme de variedades de patata, es suficiente con seleccionar una única y de calidad. Tanto las patatas como la cebolla tienen que tener un corte traje antes del \\’masaje\\’. Sazonar con sal gordita el besugo, ponerlo en una fuente antes aceitada, tirarle algo de aceite por arriba y meter al horno calentado anteriormente a 180º. En Directo al Paladar nos chiflan estas fiestas y poseemos una cantidad enorme de recetas para que aciertes seguro en tus comidas de Navidad. Realizamos el pescado haciéndole unos cortes transversales hasta llegar a la espina.
Lo común es ofrecer tres cortes sutilmente inclinados en una sola de sus caras. Después, introducimos en cada uno de los cortes media rodajita de limón. “El besugo es el más madrileño de todos y cada uno de los pescados del mar. Proviene, en general, del Atlántico y del Cantábrico; pero yo sospecho que no se encuentra a gusto mientras que no llega a Madrid y lo ponen al horno”.
Besugo A La Vasca
Si no tienes a mano txakoli, utiliza cualquier vino blanco de calidad. Agregamos agua sin que llegue a cubrir las patatas y un hilo de aceite de oliva. A mitad de cocción volvemos a rociar con el líquido de la bandeja y dejamos destapado hasta el momento en que finalize de llevar a cabo. Espolvoreamos con perejil picado y servimos el besugo al horno al instante.
En el momento en que lleven 30 minutos, realizamos una costra de pan rallado, pimentón y un diente de ajo machacados en el mortero y la extendemos sobre los besugos. La guarnición debe quedar en este punto antes de acompañar al pescado en el horno. Sergio Ortiz de Zarate es todo un experto a la hora de trabajar pescados. En Directo al Paladar nos encantan estas fiestas y poseemos cientos de recetas a fin de que aciertes seguro en tus comidas de Navidad. Si pensabas que este año te ibas a librar de tener que rascarte el bolsillo para conseguir disfrutar de un óptimo besugo, siento decirte que estabas muy equivocado. Tanto el chef de Corral de la Morería como nuestros amigos de La Gaviota nos afirman que “en este momento en estas datas ronda los 70€ cuando el resto del año tiende a estar en 35€ o 40€”.
Receta De Besugo Al Horno Con Patatas
Con ellas cocino recetas y viajo con todas y cada una ellas alrededor del planeta. La comida entra por los ojos y yo a través de mi propósito me como todo lo que veo. En el instante en que puedo asimismo escribo sobre lo que otros cocinan.
Espolvorear con una cucharada de perejil picado y regar con dos medidas de cuchara de vinagre. Sacar el besugo del horno y verter por encima el aceite y los ajos fritos. Justo a la hora de servir, abre el besugo, vierte el vinagre y el refrito ardiente con perejil picado. Vuelve a ingresar este caldo a la sartén y dale un último hervor.
Precalentar el horno a temperatura fuerte calculando cerca de 10 minutos para que se caliente. Si no tienes guindilla seca, o no disfrutas, puedes emplear cayena en el refrito. Si te atreves con un besugo de dos kilos, mantenlo en el horno 5 minutos y medio . Hay una cantidad enorme de variedades de patata, es suficiente con escoger una nueva y de calidad. Tanto las patatas como la cebolla tienen que tener un corte traje antes del \’masaje\’.
Esta operación, afín a la que hacía Martín Berasategui para llevar a cabo aquel mítico “rodaballo a los tres vuelcos”, la repite entre 4 y 6 ocasiones hasta hallar que se haya relacionado todo bien. Según el chef bilbaíno, “lo más importante cuando queremos elaborar un besugo es adivinar con la técnica que aplicamos para que saquemos el máximo desempeño al pescado”. Cumplidos los 20 minutos, eche la mezcla de aceite y ajo y un tanto del jugo de cocción sobre el besugo.
Lo común es ofrecer tres cortes levemente inclinados en solo una de sus caras. Después, ingresamos en todos y cada uno de los cortes media rodajita de limón. Aparte de esto, no solo no posee colesterol, sino asimismo se encuentra dentro de los pescados mucho más magros de cuantos habitan el fondo marino, ya que consumir cien gramos comporta 86 kcal. El besugo tiene una enorme versatilidad culinaria, protagonizando un sinfín de preparaciones que forman parte prácticamente intrínseca del recetario considerablemente más tradicional.
Pela y corta en rodajas la patata y las cebolletas en aros. Pásalas a una tartera y riega con una medida pequeña de agua. Arroja un chorro de txakoli y espolvorea perejil picado.
Mi pluma y mi cámara son 2 herramientas indispensables en mi día a día. Con ellas cocino recetas y viajo con todas y cada una ellas alrededor del planeta. En el momento en que puedo asimismo escribo sobre lo que otros cocinan.