Con el pollo son incontables las recetas que puedes realizar. La verdad es que hago pollo muy de forma frecuente pero siempre y en todo momento tratando de variar las recetas. En verano, apetece poco prender el horno para elaborar cualquier postre. Pero no nos es necesario para darnos un capricho, asombrar a los invitados o tomar un óptimo postre después de comer. Pone las piezas de pollo rebozado sobre el papel de horno.
La corteza de estos exquisitos filetes de pollo al horno tiene un sabor increíble y al empanado no hacerlo con pan es una comida baja en hidratos de carbono. Al horno, en salsa, en formatos de recetas fáciles y veloces, en entero , e incluso en recetas con pechuga troceada o con opciones rellenas, las sencillas pechugas tienen la posibilidad de ser una opción barata, rápida y sabrosa de apañar un menú. Ahora pasaron un par de meses desde el principio del año y muchos vais a estar cansados de llevar a cabo dieta. Por si acaso deseáis seguir, os propongo estas recetas con pechugas de pollo para mantener el propósito de comer rápido . Poner el contenido del sobre de sopa de cebolla en un bol y empanar con este contenido los filetes de pechuga de pollo.
Tilapia En Salsa
Añade un chorrito de aceite de oliva por encima. Con las manos limpias, masajea las pechugas de pollo a fin de que se queden bien engrasadas con el aceite o, si lo prefieres, puedes pincelarlos con un pincel de cocina. Asimismo debes añadir las condimentas que escojas a fin de que se repartan uniformemente por la carne. Para iniciar con la receta de pechuga de pollo al horno jugosa, primero tienes que conseguir 2 pechugas de pollo de buena calidad, a poder ser de pollo campero.
Introducimos la fuente con las pechugas en el horno, calentado anteriormente a 200ºC con calor arriba y abajo, y cocemos a lo largo de minutos. Volteamos a media cocción para que se hagan de manera traje. Retiramos del horno, cortamos en rodajas y servimos rápidamente.
De Qué Manera Hacer Pechugas De Pollo Jugosas Al Horno
En cuestión de 6 -7 minutos los tendrás completados. Vamos a por la receta de los filetes de pollo al horno. La idea de esta receta de pechugas picantes al limón es ahorrarnos el marinado previo que tan bien sienta al pollo, para tener el plato listo en media hora. Para ello, se cocina primero la carne a fuego alegre en la plancha, marcándolo por ambos lados, y después se añade agua, tapándolo, para terminar la cocción creando humedad en el interior. Se “marina” después, echando la salsa de limón al retirar del fuego.
Además, su cocción es realmente simple, y se puede elaborar de diversas formas. Esta receta nos solicita el ahínco de no excedernos con la salsa, -que a propósito es una delicia- o cuando menos no mojar pan para no disparar el aporte calórico. Con unas tajaditas de pollo y algo de salsa sin pan, es suficiente para sentirse bien saciado, merced al toque picante. Hornear a lo largo de unos minutos, dándoles la vuelta a mitad de cocción.
Limpiamos bien las pechugas, retirando las grasa y los ligamentos, y secamos con papel de cocina. Disolvemos la sal en el agua en un envase extenso y sumergimos las pechugas, que queden completamente cubiertas. Dejamos reposar en la salmuera entre 30 minutos y una hora. Pasado el tiempo de reposo retiramos las pechugas de la salmuera.
Cualquier guarnición le van a ir bien, desde el clásico arroz blanco a patatas fritas o asadas, hojas verdes, verduras o lo que nos apetezca. Me gusta tomarlas con puré de manzana asada. Estos filetes de pollo son horneados, conque no tienes que freírlos en una sartén, sencillamente ponlos en el horno y ahora puedes dedicarte a elaborar el acompañamiento que servirás junto con el pollo.
Precalentar el horno a 200ºC y preparar una bandeja o fuente. Sacar el pollo de la salmuera y untar con un chorrito de aceite de oliva por todas partes. Añadir pimienta negra, el zumo de limón, los dos géneros de pimentón y la mostaza, y estimular con las manos bien para cubrirlas con esta pasta. Sus colores, aromas y texturas me permiten hacer platos con múltiples composiciones. Jamás me olvido del maridaje de las comidas, pero si hay verdaderamente algo que me agrada es preparar un buen gin tonic al acabar de comer. Mientras se excita el horno, quita las pechugas de la salmuera y colócalas en la fuente que vayas a emplear para ingresar en el horno.
En esta ocasión, en unCOMO vamos a estudiar de qué manera llevar a cabo pechugas de pollo al horno. Una alternativa muy sencilla y útil a la hora de transformar esta carne no solo en plato principal, sino también en acompañamiento de ensaladas o como fiambre para un sándwich. Sumerja cada filete de pollo en mantequilla y también rápidamente empanícelos con la mezcla de condimentos y colóquelos en la rejilla de la bandeja para hornear.