Ponemos 4 rebanadas de pan duro en una fuente y, con la ayuda de una jarra o un cucharón, vamos vertiendo la leche aromatizada sobre el pan. Dejamos que se empapen bien las rebanadas unos 5 minutos y les damos la vuelta para que se empapen bien por el otro lado durante 5 minutos mucho más y que absorban de esta manera toda la leche. En el momento en que llegue a ebullición, se quita del fuego para evitar que se salga, y se deja descansar a fin de que enfríe unos minutos.
En ese tiempo, no va a cocer, simplemente se disolverá el azúcar. Mientras, pela las naranjas y deja, por un lado, la cáscara sin nada de blanco por el hecho de que amargaría y, por otro, los gajos. Pasada la hora, añade la cáscara de naranja y deja que cueza otra media hora a la misma temperatura. Añade los gajos de naranja y deja que cueza 40 minutos más.
Torrijas De Todas Las Clases Consejos Para La Torrija Especial
Y para quienes deseen estudiar a llevar a cabo entre las recetas de almíbar de miel que mucho más rica queda, ahora les lo enseñamos. Prometido que esta es mi última receta de torrijas por este año. No diréis que nos he dado opciones para realizar en Semana Santa este dulce tan típico, conque creo que con las 4 fórmulas que os he dado es mucho más que bastante. Termino con entre las preparaciones más habituales, las torrijas tradicionales con almíbar de miel, también conocidas como torrijas sevillanas, en tanto que esta elaboración pertence a las mucho más populares en Sevilla.
Para ello se pone a calentar el agua con el azúcar y la ramita de canela a fuego medio. Cuando tenga una textura de almíbar y el azúcar se haya disuelto, se quita del fuego y se deja enfriar por completo. Como verás ahora, preparar almíbar de miel es muy simple y rápido, pues solo deberemos cocinar unos pocos elementos a fuego medio un par de minutos. Las torrijas con almíbar de miel son, adjuntado con las torrijas con azúcar y canela, una de las formas más extendidas de elaborar este dulce típico de la Cuaresma . En verdad, la preparación de ambos tipos es prácticamente idéntica, cambiando sólo el acabado final. Coloca en una cacerola 2,5 litros de agua con un kilo de azúcar y deja que se cocine durante una hora a temperatura media-baja .
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1,5 litros de agua, 400 gramos de azúcar y 1 naranja para el almíbar. → Estas torrijas no necesitan preservarse en la nevera, pueden estar 5-6 días a temperatura ámbito en una zona fresca, por el hecho de que el azúcar actúa como conservante. Prosigue mojando rebanadas de 4 en cuatro, ves friendo y cociendo en almíbar todo el pan, cuando cojas ritmo, va a salir como en cadena.
Freímos las torrijas durante 1 minuto por cada lado hasta que veamos que están doraditas y las vamos sacando a una fuente con papel absorbente para remover el exceso de grasa. Para empezar, si se desea aromatizar la leche, poner a calentar esta en un cazo adjuntado con el azúcar, 1 de las ramas de canela partida en 2 o 3 trozos y la piel de 1 limón sin llegar a recortar la parte blanca. Cuando rompa a hervir, apagar el fuego, tapar y dejar infusionar unos diez minutos.
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Para esto, echa en una cacerola la leche con una rama de canela y 150 gramos de azúcar . Pon a fuego medio-bajo a lo largo de 20 minutos y después, retira del fuego, saca la canela y deja que se enfríe. No debe cocer, se trata de que coja el aroma de la canela y se disuelva el azúcar. Para que esta receta de torrijas quede perfecta, hay que escoger un óptimo pan de torrijas, preparar con paciencia el almíbar de naranja y una infusión de leche y canela. Después será el momento de remojar el pan, freírlo y cocerlo en el almíbar. Lo mucho más difícil es soportar a probarlas hasta unas horas más tarde.
Freímos hasta el momento en que la torrija esté dorada por las dos caras. Retiramos del fuego y dejamos enfriar a temperatura ambiente antes de usar. Si disfrutas puedes aromatizar el almíbar cuando se esté reduciendo al fuego con un chorrito de anís. Esta receta de torrijas de almíbar es de las mucho más fáciles para realizar este dulce. También se llaman ‘torrijas tontas’ por su simplicidad, pero están muy, muy buenas. Podéis llevar a cabo las torrijas con pan de brioche o con un buen pan de barra que debéis dejar “secar” al menos 24 horas para obtener un buen resultado ya que la miga empapa más si está más seca.
La primera cosa que vamos a hacer será elaborar el almíbar. Para ello, ponemos en un cazo 100 ml de agua y cien g de azúcar. Combinamos bien con unas varillas para disolver el azúcar e incorporamos la piel de media naranja, eludiendo la parte blanca. Ponemos el cazo a fuego medio, aguardamos a que la mezcla llegue a ebullición y dejamos cocer a fuego bajo 5 minutos. Después, sacamos la piel de naranja y colocamos el almíbar en un recipiente aparte para dejar que se enfríe. Y decimos ‘almíbar de miel solo con miel y agua’ porque lo que se hace muy de manera frecuente es poner una proporción bastante elevada de azúcar y un poquito de miel para que dé sabor, aparte del agua.
Mientras que esperas a que el aceite esté ardiente, ves mojando el pan en leche, de 4 en 4 rebanadas, y escúrrelas un poco apretando tenuemente entre las manos. Echa el pan mojado a la sartén a fin de que se fría y relajado, que pese a lo que logres meditar, no va a explotar ni nada similar. Tiene que haber aceite bastante para que el pan \’nade\’. Mientras se fríen, moja en leche otras cuatro rebanadas y reserva. Deja que las rebanadas que estabas friendo cojan color oro oscuro y escurre el aceite, apretando cada una entre dos espumaderas. Las torrijas con almíbar de miel están mejor consumidas a temperatura ámbito y consumirlas en exactamente el mismo día o como muy tarde al día después, por ejemplo haciéndolas durante la noche para el desayuno.
Receta De Torrijas Con Almíbar De Miel
Para ello, poner a calentar el agua, con el azúcar, la miel y si se desea otra cáscara de limón y otra rama de canela partida en 2 ó 3 trozos. Llevar a ebullición y cuando rompa a hervir apagar el fuego y dejar enfriar. Retira la carne de naranja y las cascarillas del almíbar y reserva. Una vez frito, echa el pan de 4 en cuatro rebanadas y deja que cueza unos minutos.
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Llevamos de nuevo el agua del remojo al fuego con el resto del azúcar y dejamos reducir hasta el momento en que se forme un almíbar espeso. Dejamos enfriar las torrijas regadas con este almíbar hasta el momento de servir. Ponemos el agua al fuego con la piel de limón y medio azúcar y llevamos a ebullición.El azúcar debe quedar bien diluido, así que remueve de cuando en cuando. Separamos del fuego al instante y dejamos templar. Coloca en un cazo la miel y el agua, mezcla con la espátula y añade, si lo quieres, el licor o el aromático que desees, y según el género de torrijas o de dulce en el que vayas a usar el almíbar.